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Pompilio Heliodoro Toral Veléz fue teniente político de la parroquia Quingeo, hombre de negocios, y distinguido hombre cuencano.

Biografia

Nació en la ciudad de Cuenca, en 1926 siendo el hijo primogénito del Sr. Dn. Alfredo Toral Carpio, exdueño de la actual hacienda ganadera San Juan, y de Dña. Celia Vélez. Tuvo 9 hermanos, entre los cuales se puede destacar al Sr. Miguel Ángel Toral, doctor en jurisprudencia graduado en la Universidad de Cuenca y docente del Colegio Nocturno San Francisco de la ciudad de Cuenca, Herlinda Toral, mujer dedicada a la docencia. Pasó su infancia en la hacienda de Quingeo, propiedad de su padre, ubicada en el sector del mismo nombre, en las cercanías del rio Quingeo y del rio Salado. A una corta edad, ingresó a la Escuela Gonzalo Cordero Dávila, en el que recibió enseñanza secundaria. Posterior, tuvo que interrumpir sus estudios para ayudar a sus padres y hermanos en la hacienda. A pesar, de no tener un título universitario tuvo, un desenvolviendo de liderazgo político impresionante, por eso, en 1978, fue designado teniente Político de la parroquia por parte de las autoridades subrogantes de la ciudad de Cuenca, habiendo construido durante su mandato el actual edificio de la Casa Comunal donde actualmente atienden la Tenencia Político, la Junta Parroquial y el Registro Civil. ​

Se casó en Quingeo, el 19 de junio de 1959, con la distinguida dama, Doña Imelda Florencia Nieto Linares, perteneciente a unas distinguidas familias del cantón Sígsig, pues era hija de Alfonso Nieto y Doña María Linares hija de uno de los hacendados ya desaparecidas de la región. Heliodoro y Imelda procrearon nueve hijos: Celia enfermera retira quien laboro por varios años en la Clínica Latinoamérica junto al fundador y presidente de vitalicio, el Dr. Rubén Astudillo Quintanilla y su esposa la Sra. Eloísa Molina, entre otros doctores, Roció, Alfredo, Washington, Leoncio, Orlando, Octavio, Richard y Osmara. Mantuvo, una estrecha relación con personas acaudaladas del sector, como el Sr. Daniel Murillo, el Sr. Alvino Valverde, Sr. Don Esteban Vega y su esposa Doña. Cecilia Vega suegros del Arq. Juan Córdova Vintimilla, actual dueño de la hacienda San Juan, el Sr. Julio Olmedo Rubio Astudillo, el Sr. Napoleón Reinoso, el Sr. Omar Reinoso, David Cali Murillo entre otros personajes ilustres de Quingeo. De la misma manera, con la familia, Gómez, Astudillo, Pazán, Morales, Ayora, Torres, Olmedo, Gomez coello, Torres, entre otros. Además, mantuvo una amistad con párroco de la parroquia como son; el padre Humberto Astudillo 1945, el presbítero Alberto Arce entre 1925- 1929, el padre Noel Karol, el padre Carlos Solano Mogrovejo quien fue en 1949 designado párroco por el Monseñor Daniel Hermida. Asimismo, la mayoría de los apellidos que se mencionada son de los que se llegaron a establecerse. Entre las más importantes están: Murillo, Toral, Vázquez, Orellana, Peñaloza, Urgilés, Reinoso, Padilla, Chacón, Mendoza, Flores, Rubio, Morales, Quezada, Nieto, Gómez, Pesántez, Arévalo, Torres, Calle, Pacheco, Cedillo, Pazán, Vintimilla, Abad, Ayora, Carpio, Domínguez, Gomezcoello,” “Entre los apellidos originarios más relevantes encontramos: Chillogallo, Suconota, Quituisaca, Guanoquiza, Yunga, Puzhi, Guayara, Tenecota, Malla, Maita, Montaño, Tama, entre otros”. (Murillo, D. pp. 27).​

A parte de ser teniente político de la parroquia de Quingeo por cuatro años y construir la edificación del inmueble, de la mano con el secretario en ese momento el Sr. Gerardo Gómez. Esta función fue sucedida al Sr Omar Reinoso Padilla en el año de 1990 quien culmino dicha obra.​ Asimismo, fue el promotor de la devoción al Cristo del Consuelo en el sector de “Cochapamba Grande” ya que, tuvo iniciativa de venerar al Cristo del Consuelo quien, había tenido una fotografía del Cristo, venerado en la ciudad de Guayaquil, de sus viajes que realizaba a la ciudad. De la misma manera, dono un árbol de ciprés de estatura mediana que tenía forma de cruz que estaban dentro de la propiedad de su padre. Asimismo, fue un fiel devoto de la imagen quien, durante varios años llevaba a la imagen a su domicilió, y de la misma manera su esposa fue sindica de la capilla y pertenecía al pregón de la Iglesia Matriz Quingeo. Por otro lado, fue uno de priostes de la pasada del Divino Niño Jesús de la comunidad de San Antonio de Trabana de la parroquia vecina San Ana conjuntamente, con la familia Moscoso, Valverde y Vásquez, esta procesión, su descendencia sigue con la tradición más de 35 años. Esta procesión es una actividad religiosa que une a feligreses de las dos parroquias. De la misma manera, converso con la Sra. Luz Oramas, para que donara los terrenos donde esta edificada la capilla de Cochapamba Grande. No, se puede dejar de lado, el aporte a la comunidad del Sr. Cruz Pesantes y Emma Enríquez, quienes vendieron los terrenos para la edificación de la Casa Comunal de la comunidad.​

Muerte

Lamentablemente, falleció en el año 1991 de un infarto al corazón, en la clínica de su gran amigo, el Dr. Leoncio Cordero Jaramillo cofundador de la clínica Santa Ana, sus restos fueron velados en el domicilio ubicado en la Av. Luis Vargas Torres. En honor a prestigioso doctor cuencano le coloco a uno de sus hijos el nombre de Leoncio, además, fue médico de cabecera de la familia y de su padre Sr. Don. Alfredo Toral Carpio. Sus restos reposan en el mausoleo de la familia en el Cementero Patrimonial de la Ciudad de Cuenca.