El término «burguesía» designa la clase social dominante del sistema capitalista, formada básicamente por propietarios de bienes o capitales.

La palabra está asociada al vocablo «burgos», que originalmente significaba «fortaleza» o «pequeñas ciudades». Esto porque las antiguas ciudades europeas estaban protegidas por murallas.

Con eso, la burguesía surge al final de la Edad Medieval, con la expansión y desarrollo de las ciudades medievales.


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Origen de la burguesía

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A partir del siglo XIII, la mejora de las técnicas agrícolas y el consiguiente incremento del comercio hizo que la burguesía fuera presionando para que se facilitara la apertura económica de los espacios cerrados de las urbes, se redujeran los tributos de portazgo y se garantizaran formas de comercio seguro y una centralización de la administración de justicia e igualdad de las normas en amplios territorios.

Que les permitieran desarrollar su trabajo, al tiempo que garantías de que los que vulnerasen dichas normas serían castigados con igual dureza en los distintos territorios.

Aquellas ciudades que abrían las puertas al comercio y a una mayor libertad de circulación, veían incrementar la riqueza y prosperidad de sus habitantes y las del señor, por lo que con reticencias pero de manera firme se fue diluyendo el modelo.

Las alianzas entre señores eran más comunes, no ya tanto para la guerra, como para permitir el desarrollo económico de sus respectivos territorios, y el rey fue el elemento aglutinador de esas alianzas.

En el siglo XII surgen los burgos, ciudades en donde apareció la burguesía como nueva clase social. Los burgueses estaban totalmente fuera del sistema feudal, porque no eran ni señores feudales, ni campesinos, ni hombre de iglesia, sino comerciantes.»Los aires de la ciudad dan libertad» se decía, y con razón, puesto que quienes podían radicarse en las ciudades, tenían todo un nuevo mundo de oportunidades que explotar. No era raro que burgueses y representantes del orden feudal se miraran con desconfianza y desdén, aunque se necesitaran unos a otros, por el minuto al menos.

En los burgos surgieron muchas instituciones sociales nuevas.

El desarrollo del comercio llevó aparejado consigo el del sistema financiero y la contabilidad. Los artesanos se unieron en asociaciones llamadas gremios, ligas, corporaciones, cofradías, o artes, según el lugar geográfico.

Surgió también el trabajo asalariado, economía monetaria, surgimiento de la banca (crédito, préstamos, letras de cambio) algo virtualmente desconocido en el mundo feudal y el cual origina un incipiente capitalismo. También aparecen las Universidades como respuesta de los gremios de educadores.

En ese período ocurrió el declive del sistema feudal, surgió el sistema absolutista, la reforma protestante, la formación de las monarquías nacionales, entre otros.

El nuevo período que surge, denominado «edad moderna», aparece junto con la clase burguesa. Esta es representada por nuevos valores e ideales (libertad personal, libre comercio, derechos religiosos y civiles).

El Renacimiento Comercial surge a partir de la expansión del comercio. La expansión comercial fue intensificada por la expansión ultramar de los siglos XV y XVI, las Cruzadas y también por la apertura del Mar Mediterráneo.

Todo ello posibilitó ampliar las relaciones comerciales, así como desarrollar el comercio interno de las ciudades, impulsadas por las ferias.

De tal modo, el surgimiento de las ciudades fue un factor importante para la formación de la burguesía. La cual está formada por mercaderes y campesinos que vivían en los «burgos», los burgueses.

Características de la burguesía

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Para poder participar en una corporación, era obligatorio seguir los patrones de la sociedad, principalmente la religión.

  1. Los trabajadores de las corporaciones eran llamados jornaleros, ellos vivían en los caserones de los maestros de oficio, también existían los aprendices, que querían aprender una función en el ramo de la artesanía.
  2. Antes, las ciudades no pasaban de los límites de la muralla y no pasaban de 20 mil habitantes. Pero las ciudades aumentaron y junto con ellas las ferias se convirtieron en grandes centros comerciales, y con ese crecimiento se creó una gran malla económica que dio seguridad para que los comerciantes iniciaran prácticas bancarias.
  3. La iglesia católica estaba en contra de las prácticas de la burguesía, porque esa nueva cultura de acumulación de capital para el lucro no era atractiva para las costumbres de la iglesia, ya que esta práctica no era muy bien vista por la sociedad de aquella época.

Toda esa potencia económica generó un cuestionamiento sobre quién realmente poseía el poder en la sociedad: los burgueses, el clero o la monarquía.

Los burgueses entendían ellos sostenían la economía de las clases sociales, merecían mas participación en la sociedad.

Entonces comenzaron las manifestaciones y luego las revoluciones. Las más conocidas son la Revolución Francesa y la Revolución Inglesa.

Ellas lograron sacar el poder absolutista monarca y el papel de la iglesia en tomar decisiones sobre el estado.

Con los avances de ese sistema, y con mayores conquistas de posesiones y tierras comenzó la primera revolución industrial, que trajo la adhesión de máquinas y se desarrolló el sistema capitalista industrial. De ahí se dividió burguesía y el proletariado.

La burguesía sirvió principalmente para sustituir el feudalismo, que no estaba más supliendo las necesidades de la época, consecuentemente fue sustituida por un sistema de producción automatizada en masa.

El Proletariado

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En el latín es donde se encuentra el origen etimológico del término que ahora nos ocupa. En concreto, se establece que proletariado procede de “proletarius”, que puede traducirse como “lo que pertenece a los hijos”.

La clase social formada por los proletarios se conoce como proletariado. Los proletarios son los obreros, aquellos trabajadores manuales que reciben una remuneración por su trabajo.

Por ejemplo: “Quiero llegar a la presidencia para defender los intereses del proletariado”, “Un sociólogo norteamericano sorprendió al mundo académico con un polémico ensayo sobre la situación actual del proletariado”, “No importa quiénes gobiernen, el proletariado siempre será discriminado”.

En el sistema capitalista, el proletariado es la clase social más baja. Estos trabajadores no disponen de los medios de producción, por lo que se ven forzados a vender su fuerza de trabajo a la burguesía. En otras palabras, el proletariado es un empleado del burgués quien, como empleador, le paga un salario por su trabajo.

Karl Marx acuñó esta noción de proletariado para oponer la clase obrera a la clase burguesa. El término, de todas formas, tuvo su origen en la Antigua Roma. Allí, los proletarios eran los ciudadanos de la clase social más baja y no tenían ninguna propiedad. El Estado sólo consideraba a estas personas para generar proles (sus hijos), que pasaban a formar de los ejércitos del imperio.

En el siglo XIX, con la llegada de la Revolución Industrial, se produjo un importante impulso a los proletarios, que tomaron mayor protagonismo en la sociedad debido a que su mano de obra era fundamental para que las empresas pudieran salir a flote.

Eso provocó que el proletariado se encontrara explotado, para poder obtener el mayor número de beneficios para el empresario. De ahí que aquel conjunto de obreros se identificara por tener las siguientes señas de identidad:

• Vivían en las ciudades y numerosos de aquellos habían dejado sus hogares en el campo y sus trabajos agrícolas o ganaderos para pasar a formar parte de las industrias.

• Se encontraban sometidos a pésimas condiciones laborales, tanto en cuanto a higiene como a duras y largas jornadas laborales. Todo sin olvidar tampoco la inseguridad de empleo que poseían en todo momento.

• Estaban alienados y su desesperanza hizo que muchos de ellos no sólo enfermaran sino también que intentaran ahogar sus penas en el alcohol.

Además de todo ello, hay que saber que en aquel momento el proletariado se encontraba conformado por trabajadores cualificados, por otros empleados que no tenían ni experiencia ni cualificación así como por las mujeres y los niños. Estos dos tipos de ciudadanos eran los que peores condiciones laborales tenían, de ahí que se colocarán como el escalón más bajo dentro del proletariado.