Calorífero

aparato para calentar el aire

Se llama calorífero al aparato destinado a calentar el aire procedente del exterior y a dirigirlo enseguida a los sitios en donde haya que utilizarse.

Hipocausto de las termas romanas de Cartagena

Lo más común es que los caloríferos lleven el calor a grandes distancias en cuyo caso se colocan en cuevas o habitaciones del piso inferior. El hogar se cubre de fábrica para que las paredes no dejen perder el calor desde donde parten tubos que conducen el cuerpo portador de calor.

Historia editar

Desde los tiempos más antiguos se han empleado los caloríferos con el nombre de hipocaustos por los romanos y de hangs por los chinos. Los hipocaustos calentaban solo el suelo de las habitaciones por debajo de las cuales pasaban.

En la abadía de Saint-Gall de Suiza existe un hogar designado por la leyenda de este modo Caminus ad calefanciendum u hornillo del hipocausto que va a parar al Evaporatio fumi. En el centro del techo se lee Subtus calefactoria, lo cual no deja dudas de que el humo pasaba por debajo del pavimento.

Tipos editar

Los caloríferos pueden ser:

  • De aire caliente: es aquel en el que el aire quemado recorre los diferentes conductos del aparato o bien el aire exterior atraviesa los tubos metálicos en donde se calienta.
  • De vapor: consiste siempre en un generador de vapor con todos sus accesorios, en tubos que lo conducen a los sitios donde debe condensarse, en aparatos de condensación y en tubos destinados a devolver a la caldera el agua procedente de la condensación del vapor o a evacuarla al exterior.
  • De agua caliente: es un sistema de calefacción de agua caliente que se extendió en el siglo XIX tanto en grandes establecimientos como en casas particulares y es precursor de los actuales sistemas de calefacción por agua.

Referencias editar

  • Diccionario de higiene pública y salubridad, Ambrosio Tardieu, 1896.