Diferencia entre revisiones de «Manuel Azaña»

Contenido eliminado Contenido añadido
Sin resumen de edición
m Revertidos los cambios de 95.62.167.22 (disc.) a la última edición de Camima
Línea 403:
La llegada a Montauban de un grupo de falangista puso sobre alerta al grupo de Azaña; [[Luis Ignacio Rodríguez]] alquiló unas habitaciones en el Hotel du Midi, adonde fue trasladado Azaña el [[15 de septiembre]].
 
El 16 sufrió un grave infarto cerebral que le afectó al habla y le provocó parálisis facial. Un mes después, parecía sin embargo estar bastante recuperado, hasta el punto de que el nuevo obispo de Montauban, [[Pierre-Marie Théas]], que acababa de intervenir para lograr la conmutación de la pena de muerte recientemente impuesta a Cipriano de Rivas, se acercó hasta el hotel para conocerlo. Con todo, a finales de octubre sufrió una nueva recaída porde la qualque murióya no se podría recuperar:
{{cita|pasadas las diez de la noche del día [[3 de noviembre]], viéndole morir y angustiada por su soledad en aquel dolor, [Dolores de Rivas] encargó a Antonio Lot que llamara a Saravia y [una] monja, soeur Ignace, que cumpliendo sus deseos volvió un poco más tarde acompañando al obispo.
Y así, en el momento de su muerte, (...) a las doce menos cuarto de la noche, rodeaban a Manuel Azaña (...) su mujer, Dolores de Rivas Cherif, el general Juan Hernández Saravia, el pintor Francisco Galicia, el mayordomo Antonio Lot, el obispo Pierre-Marie Théas y la monja Ignace.<ref>Íbidem, pág. 467.</ref><ref>Según testimonios del médico y del obispo, Azaña recibió los últimos sacramentos. Tres testimonios da el obispo, junto a la carta del médico que le asistía por aquel entonces, Dr. Acosta, y del que fuera director de [[El Imparcial]] y diputado de I.R. [[Ricardo Gasset]] (publicada en el ''Bulletin Catholique de Mountauban'' del 21 de noviembre de 1940; cf. Federico Suárez, ''Manuel Azaña y la Guerra de 1936'', Ed. Rialp, págs. 176 y ss. ISBN 84-321-3319-1). Esta versión es rechazada por entornos cercanos, presentes en los últimos días de vida de Azaña (cf. Martínez Saura, Santos, ''Memorias del secretario de Azaña'', Editorial Planeta, 1999. págs. 680 y ss. ISBN 84-08-03217-8). Su viuda, Dolores de Rivas, encargó a dicho obispo un funeral religioso en la catedral de Montauban (cf. ''Témoignage de Madame Azaña'', en Cipriano de RIVAS CHERIF, ''Retrato de un desconocido'', Grijalbo, Madrid, 1980, pp. 500-511; Enrique de RIVAS, «Azaña à Montauban», en ''Azaña et son temps'', dir. por Jean-Pierre Amalric & Paul Aubert, Casa de Velázquez, Madrid, 1993, pp. 407-437; enrique de RIVAS, [http://arkheia-revue.org/spip.php?rubrique25 «Dolores de Rivas Cherif et Azaña»], en: ''Manuel Azaña et la France'', dir. por Jean-Pierre Amalric, Ed. Arkheia, Montauban, 2007, pp. 105-123; Jean-Pierre AMALRIC, «Monseigneur Théas et les derniers jours de Manuel Azaña», en: ''Monseigneur Théas, évêque de Montauban, les Juifs, les Justes'', dir. por François Drouin et Philippe Joutard, Privat, Toulouse, 2003, pp. 79-85).</ref>}}