Diferencia entre revisiones de «Casa Batlló»

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[[Archivo:Gaudi-CasaBatllo-façanaPosterior 0857.jpg|miniaturadeimagen|Fachada posterior.]]
Otro elemento característico de la fachada es su revestimiento con vidrios y cerámica de vivos colores, que crean diversos efectos visuales según la luz que incide en ellos. Para su confección, picó el anterior muro y lo recubrió de [[Mortero (construcción)|mortero]] de [[cal]], sobre el que colocó los vidrios del taller Pelegrí, combinados en diferentes tonalidades; sobre estos vidrios esparció a todo lo largo de la fachada una serie de discos de cerámica (un total de 330) fabricados de forma manual en [[Mallorca]]el taller de Sebastià Ribó —excepto la cruz, realizada en la Fábrica La Raqueta de Mallorca—, realizados en [[arcilla]] con diversos colores de óxidos naturales, y confeccionados en cuatro tamaños: 15, 21, 27 y 35&nbsp;cm.<ref>{{Harvsp|Rodríguez|Sosa|Noya Álvarez|López Sáenz|Blasco Piñol|2008|pp=36-37.}}</ref>
 
Otra de las singularidades de la fachada son sus balcones, realizados con hierro fundido y pintados de [[carbonato de plomo]] para evitar su [[oxidación]], circunstancia que les otorga un color [[marfil]]eño. Están colocados sobre peanas de piedra con forma de [[concha]] marina. Hay un total de nueve balcones, además de las cuatro terrazas situadas sobre la tribuna. Su forma evoca un antifaz o una máscara teatral —aunque hay quien ve en ellos la parte superior de una [[calavera]]—, excepto el balcón del desván, que tiene forma de flor o de bulbo vegetal, semejante al de un [[Tulipa|tulipán]] o una [[alcachofa]]. Asimismo, el perfil quebrado y enroscado de estos balcones recuerda la forma de un [[pergamino]]. Casi todos tienen el mismo tamaño, excepto el del desván y el de la parte superior izquierda, que es una barandilla doble, con tres huecos. En 1983 los balcones fueron restaurados y recuperaron su color original, que se había oscurecido.<ref>{{Harvsp|Rodríguez|Sosa|Noya Álvarez|López Sáenz|Blasco Piñol|2008|pp=40-41.}}</ref>