Ye Wanyong ((pronunciado [i wan.joŋ]) (Coreano: 이완용, Hanja: 李完用), 17 de julio de 1858, Seongnam - 12 de febrero de 1926), también conocido como Yi Wanyong, fue un ministro de Corea, pro-japonés, representante principal en la firma del Tratado de Anexión Japón-Corea colocando así a Corea bajo el dominio japonés en 1910.

Ye Wanyong
이완용
Información personal
Nombre en coreano 이완용 Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacimiento 17 de julio de 1858
Seongnam
Fallecimiento 12 de febrero de 1926
Gyeongseong (Seúl bajo colonización japonesa)
Causa de muerte Neumonía
Residencia Estados Unidos y Seúl Ver y modificar los datos en Wikidata
Nacionalidad Coreana
Información profesional
Ocupación Ministro de Educación (Corea)
Primer Ministro durante el protectorado de Japón a Corea
Distinciones
  • Gran Cordón de la Suprema Orden del Crisantemo Ver y modificar los datos en Wikidata

Educación y primeros años editar

Nació en una familia prominente en provincia de Jeolla-do, pasó tres años en el Estados Unidos entre 1887-1891. Fue miembro fundador del Club Independencia establecido en 1896 perteneciente a la "facción reformadora", que quería occidentalizar Corea y abrir el país al comercio exterior.

Debido a la victoria japonesa en la guerra ruso-japonesa, el gobierno japonés intento expandir su influencia. El 9 de noviembre de 1905, Itō Hirobumi llegó a Hanseong y le dio una carta del emperador de Japón al emperador Gojong, emperador de Corea, pidiéndole a firmar el tratado.[1][2]​ Él, que en ese momento era ministro de educación, pasó a ser el jefe de los cinco ministros (incluyendo a Park Jae-soon, Lee Ji-Yong, Lee Geun-taek, Gwon Joong-hyun) firmaron el Tratado de Eulsa, pacto en el que el Imperio de Corea pasa a ser un protectorado del Imperio del Japón, despojandose así de su soberanía diplomática. Este es el motivo por el que posteriormente los firmantes serán conocidos, en Corea, como los cinco traidores de Eulsa. El tratado fue firmado en contra de los deseos del emperador Gojong. Al tratado se opusieron también el ministro de Justicia y el de Finanzas.[3]

Vida durante el protectorado japonés editar

Durante el protectorado del Residente General de Corea Itō Hirobumi, Ye fue ascendido al puesto de primer ministro en 1907. Pronto una turba de coreanos molestos quemó su casa.[4]​ Este puesto le permitió obligar al emperador Gojong a abdicar en 1907, después de que el emperador trató de denunciar públicamente el Tratado de Eulsa en la segunda Convención Internacional de la Paz de La Haya.[3]

En 1910, firmó el tratado de anexión Corea-Japón por la cual Japón tomó el control total sobre Corea,[5]​ mientras que en Corea el nuevo emperador, el emperador Sunjong se negó a firmar.[6]​ Él pensó equivocadamente que la anexión haría una monarquía dual entre Corea y Japón, similar a la de Austria-Hungría y Suecia-Noruega.[7]

Por su cooperación con los japoneses, de nuevo, Ye fue recompensado con un título de nobleza japonés, convirtiéndose en un hakushaku (Conde), en 1910, título que fue elevado al de kōshaku (Marqués) en 1921. Murió por complicaciones de neumonía en 1926.

Después de la independencia de Corea al final de la Segunda Guerra Mundial, la tumba de Ye fue exhumada y sus restos fueron desmembrados.[cita requerida] En la ideología confuciana esta se considera el castigo más vergonzoso. Nombre de Ye Wanyong se ha convertido casi en sinónimo al de "traidor" en la moderna Corea.[8]

Sorprendentemente, el periódico de Seo Jae-pil, el Dongnip Sinmun (Periódico independentista) nunca escribió una sola línea de críticas en su contra.[9]

En 2005 fue promulgada la Ley especial por compensación de las propiedades de los colaboradores pro-japoneses. Basándose en esta ley el comité confiscó las propiedades[10]​ de los descendientes de nueve personas que habían colaborado con Japón cuando Corea fue anexada en agosto de 1910. Ye Wanyong era uno de los que encabezaba la lista.[11]

Véase también editar

Referencias editar

  1. The history of Korea, pp. 461–62, Homer Hulbert
  2. Ladd, George Trumbull (1 de enero de 1908). In Korea with Marquis Ito. New York : C. Scribner's Sons. Consultado el 4 de noviembre de 2016. 
  3. a b Lee Hang-bok. "The King's Letter," English JoongAng Daily. September 22, 2009.
  4. Seth, Michael J. (1 de enero de 2010). A Concise History of Modern Korea: From the Late Nineteenth Century to the Present (en inglés). Rowman & Littlefield. p. 34. ISBN 9780742567139. Consultado el 4 de noviembre de 2016. 
  5. Caprio, Mark (1 de julio de 2014). «6. Korean critics to japanesse assimilation». Japanese Assimilation Policies in Colonial Korea, 1910-1945 (en inglés). University of Washington Press. p. 185. ISBN 9780295990408. Consultado el 4 de noviembre de 2016. 
  6. Tōgō, Kazuhiko (2010). Japan's Foreign Policy, 1945-2009: The Quest for a Proactive Policy. BRILL. p. 159. ISBN 9004185011. 
  7. "Cho (who spoke fluent Japanese) called that night on Terauchi an told him that he and Ye agreed that unless the name Han-guk and the title of king were retained, no compromise could be reached. They were apparently under the impression that annexation would be a union of two countries, each retaining sovereign status, rather in the manner of Austria-Hungary or Sweden-Norway. Terauchi was surprised by this lack of understanding of Japanese aims, but he finally agreed to allow the country to be known by the old name of Chosen." Keene, Donald. Emperor of Japan: Meiji and his world, 1852-1912 (2002) pg. 674
  8. Park, Chan E. (4 de noviembre de 2016). Voices from the Straw Mat: Toward an Ethnography of Korean Story Singing (en inglés). University of Hawaii Press. p. 94. ISBN 9780824825119. «Yi Injik assisted Yi Wanyong, historically disgraced as a “seller of his own country” (maegungno), and for his contribution toward Japan’s successful infiltration into Korea was given titles, opportunities, and celebrity status.» 
  9. English JoongAng Ilbo August 30, 2001
  10. Committee OKs Seizure of Collaborators’ Property Archivado el 17 de junio de 2008 en Wayback Machine. The Chosun Ilbo,December 7, 2005
  11. South Korea: Crackdown On Collaborators The New York Times, December 24, 2007