Leontofrón
Leontofrón, también llamado Eurialo o Doriclo, fue, en la mitología griega, hijo de Odiseo y Evipe.
Tras la matanza de los pretendientes que acosaban a Penélope en el palacio de Ítaca, Odiseo se dirigió al Epiro a consultar el oráculo. Hizo escala en la corte del rey Tirimas, que lo acogió hospitalariamente. El rey tenía una atractiva hija, Evipe, y Odiseo, quizá abusando de la hospitalidad, la dejó en estado de gravidez. Fruto de la relación vino al mundo Leontofrón, también conocido como Euríalo (Εὐρύαλος). Después, Odiseo continuó su viaje.
El tiempo pasó, y, cuando Leontofrón llegó a la adolescencia, su madre lo envió a Ítaca provisto de unas tablillas en las que había escrito “signos de reconocimiento” que permitieran a su padre identificarlo. Cuando llegó el muchacho, Odiseo no se encontraba allí en ese momento y Penélope interrogó al joven, enterándose de los pormenores del asunto. Cuando Odiseo hizo acto de presencia, la celosa Penélope le persuadió para matar al muchacho, con el pretexto de que se encontraba allí, urdiendo un complot para asesinarle a él; a Odiseo. Así ocurrió y Odiseo, que “por naturaleza no era continente, ni en modo alguno moderado” mató a su hijo con su propia mano.
Lo narra Partenio de Nicea en la tercera historia, Evipa (Εὐίππη), de Sufrimientos de amor (ἐρωτικὰ παθήματα), que usó como fuente de referencia una tragedia de Sófocles titulada Euríalo (Εὐρύαλος), hoy perdida.
Referencias
editar- Partenio de Nicea, Sufrimientos de amor, 3.
- Francisco R. Adrados y Juan Rodríguez Somolinos, Diccionario Griego-Español en línea, voz Δόρυκλος.
- Pierre Grimal, Diccionario de mitología griega y romana, p.190, Barcelona: Ediciones Paidós Ibérica (1981), ISBN 84-7509-166-0.