Diferencia entre revisiones de «Zona sublevada»

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El siguiente paso en el afianzamiento del poder del nuevo "Caudillo" se produjo cuando tras el fracaso de la toma de Madrid (entre noviembre de 1936 y marzo de 1937) se planteó la necesidad de crear un "partido único", siguiendo el modelo de la [[Dictadura de Primo de Rivera]], a partir de la fusión de los [[carlista]]s y [[falangista]]s.{{Harvnp|Aróstegui|1997|p=90}} Pero tanto unos como otros tenían sus propios proyectos y aspiraciones para el nuevo Estado que se estaba construyendo en la zona sublevada.
 
Ante la "ausencia" de [[José Antonio Primo de Rivera]] que estaba encarcelado en Alicante desde antes del inicio de la guerra el 2 de septiembre de 1936 se había constituido en [[Valladolid]] una Junta de Mando Provisional encabezada por [[Manuel Hedilla]], "un político de escasa talla -y acaso nombrado por eso mismo-"{{Harvnp|Aróstegui|1997|p=88}} que no gozaba del prestigio de Primo de Rivera y que en poco tiempo había empeorado sus relaciones con el círculo de poder que rodeaba a [[Francisco Franco|Franco]].<ref>[[Hugh Thomas]], pp. 688-690</ref> "La noticia de la muerte de José Antonio [ejecutado en Alicante el 20 de noviembre de 1936], conocida a través de la prensa republicana y extranjera, se ocultó en la España de los sublevados. Franco utilizó el culto al ''Ausente'' para dejar vacío el liderazgo del partido y manejar a Falange como un mecanismo de movilización política de la población civil".{{Harvnp|Casanova|2007|p=349}}
[[Archivo:Flag of New Spain.svg|thumb|left|Bandera [[carlista]] con la [[Cruz de Borgoña]].]]
En cuanto a la [[Comunión Tradicionalista]] carlista su líder [[Manuel Fal Conde]] intentó mantener la independencia de su organización y de las milicias [[requetés]], pero el primer paso importante que dio en diciembre de 1936 (el intento de crear una Real Academia Militar de Requetés, diferenciada de las academias militares y por tanto fuera de la estructura del Ejército) tuvo una respuesta fulminante por parte del "Generalísimo" Franco: o se sometía a un consejo de guerra por "traición" o abandonaba España. Fal Conde tomó la segunda opción y se expatrió a Portugal.{{Harvnp|Aróstegui|1997|p=88}} Inmediatamente después, el 20 de diciembre de 1936, Franco decretó la militarización de las milicias carlistas y falangistas.<ref>[[Hugh Thomas]], pág. 553</ref>