Diferencia entre revisiones de «Asedio del Alcázar de Toledo»

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== Consecuencias ==
[[Archivo:Visita Hussein de Jordania al alcazar de Toledo.jpg|alt=|miniaturadeimagen|Franco y Moscardó acompañan al rey Hussein de Jordania en su visita a las ruinas del alcázar de Toledo. 1954]]
 
[[Archivo:Maqueta_de_los_restos_del_alcázar_de_Toledo_tras_el_asedio.jpg|thumb|Maqueta de los restos del alcázar tras el asedio.]]
La toma de Toledo por las columnas de Varela había sido espectacular, pero nadie hubiera podido pedir entonces, ni las pidió, responsabilidades a un Gobierno que acababa de asumir sus funciones.<ref>Viñas, Ángel. ''El escudo de la República'', Crítica, Barcelona, 2007, pág. 476, ISBN 978-84-8432-892-6.</ref> Aparte de una fábrica de armas, Toledo era una ciudad sin importancia militar para ninguno de los dos bandos. Las fuerzas rebeldes estaban aisladas, mal equipadas y sin condiciones para conducir una operación ofensiva. Aun así, los republicanos se obcecaron en conquistar el alcázar con hombres, artillería y armas que podían haber sido usados para parar el avance de los sublevados en el frente extremeño. El Gobierno del Frentye Popular pensaba que al estar la guarnición del alcázar 70&nbsp;km al sudoeste de Madrid y sin ayuda de otras fuerzas sublevadas, al conquistarlo sería una fácil propaganda victoriosa. La prensa fue invitada por el Gobierno para ver la explosión de las minas en el alcázar, el 18 de septiembre, pero hasta el 29 de ese mes no entró en el alcázar, ya con la invitación de los rebeldes.