El año siguiente sería su gran año, el año de las plusmarcas mundiales y de los [[Juegos Olímpicos de Seúl 1988]]. En los ''trials'' de [[Indianápolis]], clasificatorios para los Juegos, corrió los 100 m en unos asombrosos 10,49, una plusmarca del mundo que pulverizaba la anterior de 10,76 que tenía [[Evelyn Ashford]], y que aun hoy continúa siendo casi inalcanzable para cualquier atleta femenina.
Ya en los [[Juegos Olímpicos de Seúl 1988|Juegos de Seúl]], su actuación fue realmente memorable, ganando las medallas de oro en 100 m, 200 m y relevos 4 x 100 m, además de una plata en los relevos 4 x 400 m. A destacar que en la prueba de 200 m, batió por dos veces la plusmarca mundial, una en semifinales y otra en la final, siendo los 21,34 de esta última la actual plusmarca mundial de la prueba.