Puente del Diablo (Céret)

El puente del Diablo (del catalán: pont del Diable) o puente Viejo de Ceret es un antiguo puente medieval de piedra de arco único que data del siglo XIV (entre 1321 y 1341). Se encuentra en la ciudad de Céret (en el Vallespir, Francia). Pasa sobre el río Tec. El puente tiene una luz de 45,45 m, siendo así el de mayor vano del mundo entre 1341 y 1356.[3]​ La altura en la parte superior del arco es de 22,3 m. La leyenda local dice que la piedra que le falta al puente habría sido robada por el diablo.

Puente del Diablo (Céret)
Pont du Diable - Pont del Diable
Logo monument historique Clasificado MH (1840)[1]
273px
Vista del puente
Ubicación
Cruza Río Tech
País Bandera de Francia Francia
División Bandera de Región de Occitania Occitania
Subdivisión Pirineos Orientales
Municipio Céret
Coordenadas 42°29′43″N 2°44′39″E / 42.49529444, 2.74411389
Características
Tipo Puente en arco de mampostería
Material Piedra
Uso Caminero
Ancho ≈ 4 m
Alto 22.30 m
Vano mayor 45,45 m
Historia
Construcción 1321-1341
Reforma siglo XVIII[2]
Puente del Diablo (Céret) ubicada en Occitania
Puente del Diablo (Céret)
Puente del Diablo (Céret)

Historia editar

 
Vista general.

La construcción del puente comenzó en 1321 y terminó en 1341. Se construyó gracias a los fondos de la ciudad de Céret, ayudados por los pueblos vecinos. Fue parcialmente reconstruido en el siglo XVIII.

Entre 1718 y 1762 se procedió a varias reparaciones. Se comenzó con la rehabilitación del contrafuerte del sur. En 1735 se rehabilitó la calzada, se sellaron las grietas y se elevaron los muros de cabecera y los contrafuertes. Estas obras se terminaron seis años más tarde. En 1750 se puso en marcha la refacción de los muros de contención del puente de la avenida del lado de Perpiñán mientras que en 1762 se procedió a la misma refacción del lado de Ceret.

El gobierno francés lo clasificó como monumento histórico en 1840.[1]

Leyenda editar

 
Puente del Diablo.

La leyenda de Ceret parece bastante a otras leyendas que atribuyen la construcción de ciertos puentes al Diablo. Existan diversas variantes que tienen muchos elementos comunes con la de Ceret al siglo XIV.

Los ceretanos querían construir un puente de piedra para cruzar el Tec, pero los orillas del río estaban muy abruptas. Pidieron a todos los ingenieros del país pero después de haber visto el lugar, los numerosos expertos lo declararon que el proyecto era imposible. Un de ellos, pero, después de haber hesitado mucho, y atraído por el dinero que se ofrecía, afirmo que construiría el puente, y se comprometió a acabarlo en un año. El ingeniero se puso a trabajar, elaborando planos y empezando las obras. Rápidamente, unas bases del puente y del arco fueron construidos, pero, durante una crecida importante del rio, las obras de desfondaron. A pesar de una gran decepción, el ingeniero se puso de nuevo a construir el puente, y, al largo de seis meses, el puente cruzaba el Tec, estaba por acabar la semana siguiente. Todos estaban felices de ver el puente casi acabado, pero de repente, la bóveda se cayó. La gente estaba furiosa, y acusaron el ingeniero de ser responsable de estas desgracias. Le dijeron que si no acabaría el puente en los seis meses, lo ahorcarían. Una vez más, el ingeniero se puso a construir el puente, y hasta el úlltimo día, todo se desarrolló bien. Lastimosamente, durante la noche del ultimo día, una nueva tormenta ocurrió. El río creció, hasta hacer caer el puente de nuevo. Desesperado, el ingeniero huyó y se refugió en las sierras para escaparse del furor de los habitantes. Mientras subía, encontró un hombre, alto, seco, que le cogió el brazo:
  • ¿Dónde vas?
  • Qué te importa. Déjame pasar.
  • Sé quien eres, y te quiero salvar la vida.
  • Pero tú ¿quién eres?
  • Qué te importa. Esta noche, a media noche, el puente será construido de nuevo. Pero tendrás que cumplir mi condición.
  • ¿Cuál es?
  • Tendrás que darme la primera criatura que cruzará el puente.
Espantado, el ingeniero aceptó la condición del hombre, sospechando que fuese el diablo, solo el demonio puede construir un puente en unas horas. El diablo desapareció cuando el ingeniero acepto el acuerdo. El ingeniero volvió a su casa, y empezó a meditar lo que tenia que hacer. A las once, cuando todos dormían,, el ingeniero se dirigió a las orillas del río con un bolso grande sobre la espalda. Cuando llegó, vio el diablo trabajando rápidamente a la construcción del puente. Lo hacia muy hábilmente, ligando los materiales juntos para formar de nuevo el arco y consolidar el puente... Cuando llegó la media noche, el puente estaba acabado. Inmediatamente, el ingeniero salió de su bolso un gato negro con una olla ligada a su colla. Mientras que el diablo estaba poniendo la última piedra, la piedra angular, se parro cuando oyó pasar el animal. Dejó caer la piedra que tenía en la mano, y quiso coger el gato que confundió con un caballero en armadura. Cuando se dio cuenta de la trampa, el demonio grito, se enfado y desapareció inmediatamente. Hasta hora, todavía, esta piedra falta.

El puente en los artes editar

El puente de Ceret ya se cita en una vieja copla pirenaica:

¡Ay, adiós, puente de Ceret, estás hecho todo de una arcada, del mar a Canigó, no tiene voces que una vez!

Jacinto Verdaguer se inspiró de esta tradición popular y la integró a los versos siguientes del Canto VII de Canigó:

Tú, que de una zancada pasas el Tec, abre tu ojo de piedra, puente de Ceret, que de hijos de Mahoma no verás más.
Canto VII de Canigó', Jacinto Verdaguer

Este puente fue pintado por Cézanne y también aparece en las pinturas de Auguste Herbin. Una escena de la película francesa "El jorobado" de André Hunebelle se filmó en el puente, cuando se ven a tres asesinos que van a España para eliminar Lagardère (Jean Marais) y la hija del duque de Nevers.

Véase también editar

Referencias editar

  1. a b Referencia n.º PA00103991 en la base Mérimée del Ministerio de Cultura de Francia.
  2. Albert Salsas (1892). La construction du pont de Céret en MCCCXXI (1321). Céret: L. Lamiot. p. 16. Consultado el 16 de junio de 2014. .
  3. (en francés) Fabricio Cárdenas, 66 petites histoires du Pays Catalan, Perpignan, Ultima necat, coll. «Les vieux papiers », 2014 (ISBN 978-2-36771-006-8).