Cuna de la civilización
El término cuna de la civilización se refiere a los lugares donde, según los datos arqueológicos actuales, se entiende que la civilización ha surgido. El pensamiento actual es que no había una sola "cuna", sino varias civilizaciones que se desarrollaron de forma independiente, con el Creciente Fértil (Mesopotamia y el antiguo Egipto) como las más antiguas.[1] Otras civilizaciones surgieron en Asia entre las culturas situadas a lo largo de los valles de los ríos grandes, como Llanura indogangética en el subcontinente indio[2] y el río Amarillo en China. Se discute la medida en que hubo una influencia significativa entre las primeras civilizaciones del Cercano Oriente y las de Asia oriental. Los eruditos aceptan que la civilización caral del Perú actual, y las civilizaciones de Mesoamérica, principalmente en el México y Centroamérica moderno surgieron independientemente de las de Eurasia.
Los académicos han definido la civilización usando varios criterios, tales como el uso de la escritura, la existencia de ciudades, una sociedad basada en la clases, la agricultura, la cría de animales, los edificios públicos, la metalurgia y la arquitectura monumental, lo cual se establecen generalmente como una consecuencia de la Revolución Neolítica. El término se ha aplicado con frecuencia a una variedad de culturas y áreas, en particular, el antiguo calcolítico del Cercano Oriente (período de Ubaid) y la Medialuna Fértil, la antigua India y China. También se ha aplicado a la antigua Anatolia, el Levante y la meseta iraní, y se usa para referirse a predecesores de la cultura, como la Antigua Grecia como predecesora de la civilización occidental, incluso cuando tales sitios no se entienden como un desarrollo independiente de la civilización, así como dentro de la retórica nacional.
Si la escritura se toma como un requisito previo para la civilización, la primera "cuna" es el Egipto dinástico temprano y Sumer (Jemdet Nasr).
Uso del términoEditar
El concepto ha sido objeto de debate. El uso figurativo de cuna para hacer significar la región o lugar donde cualquier cosa es acogida en su primera etapa, ha sido atribuido por el Oxford English Dictionary a Edmund Spenser (1590). La Histoire Ancienne de Charles Rollin considera a «Egipto que sirvió a primeras de cuna de la nación sacra».
El término juega un cierto rol en el misticismo nacional, así como en movimientos nacionalistas, como en el nacionalismo indio (In Search of the Cradle of Civilization 1995)[3] o el taiwanés (Taiwan;— The Cradle of Civilization[4] 2002). También aparece en pseudohistoria esotérica, tal como el Libro de Urantia.
Auge de la civilizaciónEditar
Los primeros indicios de procesos que conducirían a la cultura sedentaria pueden verse en el Levante hacia el 12 000 a.C., cuando la cultura natufiense se volvió sedentaria; evolucionó hasta ser una sociedad agrícola hacia el 10 000 a.C.[5] La importancia del agua para salvaguardar un suministro de agua abundante y estable, debido a las condiciones favorables para recursos de la caza, pesca, y recolección incluyendo cereales, proveyeron una economía de espectro ancho inicial que desencadenó la creación de aldeas permanentes.[6]
Los asentamientos proto-urbanos más tempranos con varios miles de habitantes emergieron en el Neolítico. Las primeras ciudades que acogieron decenas de miles de habitantes fueron Menfis y Uruk, allá por el siglo XXXI a.C. (véase Población estimada de ciudades históricas).
Los hechos Históricos se separan de los prehistóricos cuando «los registros del pasado empiezan a ser guardados para el beneficio de generaciones futuras»[7]―en forma escrita u oral. Si el auge de la civilización es tomada para coincidir con el desarrollo de la escritura de la protoescritura, el calcolítico del oriente próximo, el periodo transicional entre el Neolítico y la Edad del Bronce durante el cuarto milenio a.C., y Harappa en el Valle del Indo de Asia Meridional hacia el 3300 a.C. son las incidencias más antiguas, seguidas por la protoescritura china evolucionando hacia la escritura en huesos oraculares, y de nuevo por la emergencia de los sistemas de escritura de Mesoamérica hacia el 900 a.C.
En la ausencia de los documentos escritos, la mayoría de los aspectos del albor de las primeras civilizaciones son contenidas en evaluaciones arqueológicas que documentan el desarrollo de las instituciones formales y de la cultura material. Gordon Childe definió el desarrollo de la civilización como el resultado de dos resoluciones sucesivas: la Revolución Neolítica, dejando paso al desarrollo de comunidades asentadas, y la Revolución Urbana, la cual aumentó tendencias hacia asentamientos densos, grupos ocupacionales especializados, clases sociales, explotación de excedentes, construcciones monumentales públicas y la escritura. Pocas de esas condiciones, sin embargo, son indiscutidas por los registros: ciudades densas no fueron atestiguadas en el Reino Antiguo de Egipto y ciudades tuvieron una población dispersa en el área Maya;[8] los Incas carecían de escritura aunque podían conservar registros en quipus los cuales hayan tenido quizás también usos literarios; y a menudo la arquitectura monumental precedía cualquier indicación de asentamientos de aldeas. Más que una sucesión de eventos y precondiciones, el auge de la civilización pudo ser equivalentemente presumible como un proceso acelerado que empezó con agricultura incipiente y culminó en la Edad del Bronce Oriental.[9]
Cunas únicas o múltiplesEditar
Los estudiosos pensaban que la civilización comenzó en el Creciente Fértil y se extendió desde allí por influencia.[10] Los estudiosos creen ahora que las civilizaciones surgieron independientemente en varios lugares de ambos hemisferios. Han observado que los desarrollos socioculturales se produjeron a lo largo de diferentes marcos temporales. Las comunidades "sedentarias" y "nómadas" siguieron interactuando considerablemente; no estaban estrictamente divididas entre grupos culturales muy diferentes. El concepto de cuna de la civilización se centra en el lugar donde los habitantes llegaron a construir ciudades, a crear sistemas de escritura, a experimentar con técnicas de fabricación de cerámica y uso de metales, a domesticar animales y a desarrollar estructuras sociales complejas que implicaban sistemas de clases.[11]
Los estudiosos identifican generalmente seis áreas en las que la civilización surgió de forma independiente:[12][13][14][15][16][17][18][19]
- El Creciente Fértil, incluyendo Mesopotamia (valle del Tigris y el Éufrates) y el Levante mediterráneo
- Valle del Nilo
- Llanura indogangética
- Llanura del Norte de China
- Civilizaciones andinas
- Costa del Golfo de Mesoamérica
Una cuestión que intriga a los estudiosos es por qué las civilizaciones prístinas surgieron cuando y donde lo hicieron. Las economías de todas las civilizaciones prístinas dependían de la agricultura, con la posible excepción de la civilización de la costa andina, que puede haber dependido inicialmente tanto o más de los recursos marinos. Jared Diamond postula que la razón por la que el Creciente Fértil fue la primera civilización fue que las plantas de grandes semillas y fácilmente domesticables (trigo y cebada, entre otras) y los grandes animales domesticables (ganado vacuno, cerdos, ovejas, caballos) eran nativos de la región. En cambio, en Mesoamérica se necesitaron miles de años de cría selectiva para que el maíz fuera lo suficientemente productivo como para ser un cultivo básico. Mesoamérica también carecía de grandes animales domésticos. Las llamas eran el único animal grande y domesticable en los Andes de Sudamérica. Las llamas son lo suficientemente grandes para ser animales de carga, pero no para ser montadas o utilizadas como animales de tiro. Australia carecía tanto de plantas fácilmente domesticables como de animales grandes.[20][21]
ReferenciasEditar
- ↑ "[1]". Near East: Archaeology in the 'Cradle of Civilization'. Consultado el 13 de marzo de 2018.
- ↑ "[2] Archivado el 10 de junio de 2012 en Wayback Machine.". Near East: The Indus Valley And The Genesis Of South Asian Civilization'. Consultado el 27 de marzo de 2018.
- ↑ Feuerstein, Georg (1995). «In search of the cradle of civilization : new light on ancient India» (en inglés). Consultado el 19 de marzo de 2023.
- ↑ Lin (林), Shengyi (勝義); He (何), Xianrong (顯榮) (2001). 臺灣--人類文明原鄉. Taiwan gu wen ming yan jiu cong shu (臺灣古文明研究叢書) (en chino). Taipei: Taiwan fei die xue yan jiu hui (台灣飛碟學硏究會). ISBN 978-957-30188-0-3. OCLC 52945170.
- ↑ Ofer Bar-Yosef. «The Natufian Culture in the Levant, Threshold to the Origins of Agriculture». Columbia.edu. Consultado el 4 de enero de 2016.
- ↑ La protohistoire de l'Europe, Jan Lichardus et al., Presses Universitaires de France, Paris. ISBN 84-335-9366-8, 1987, chapter II.2.
- ↑ Carr, Edward H. (1961). What is History?, p. 108, ISBN 0-14-020652-3.
- ↑
- ↑ Britannica 15th edition, 26:62–63.
- ↑ «The Rise of Civilization in the Middle East And Africa» (en inglés). History-world.org. Archivado desde el original el 7 de marzo de 2009. Consultado el 18 de abril de 2009.
- ↑ Mann, Charles C. (2005). 1491. New York: Knopf. ISBN 9781400040063.
- ↑ Wright, Henry T. (1990). «Rise of Civilizations: Mesopotamia to Mesoamerica». Archaeology 42 (1): 46-48, 96-100.
- ↑ «AP World History» (en inglés). College Board. Archivado desde el original el 22 de abril de 2008. Consultado el 28 de julio de 2008.
- ↑ «World History Course Description» (en inglés). College Board. Archivado desde el original el 3 de octubre de 2008. Consultado el 28 de julio de 2008.
- ↑ «Civilization» (en inglés). The Columbia Encyclopedia. Archivado desde el original el 8 de julio de 2012. Consultado el 28 de julio de 2008.
- ↑ Edwin, Eric (27 de febrero de 2015). «city». Britannica.com. Consultado el 4 de enero de 2016.
- ↑ «Africanafrican.com». Africanafrican.com. Consultado el 4 de enero de 2016.
- ↑ The Ancient Hawaiian State: Origins of a Political Society, Hommon, Robert J., Oxford University Press, 2013
- ↑ Kennett, Douglas J.; Winterhalder, Bruce (2006). Behavioral Ecology and the Transition to Agriculture. University of California Press. pp. 121–. ISBN 978-0-520-24647-8. Retrieved 27 December 2010.
- ↑ Diamond, Jared (1999). Guns, Germs, and Steel (Paperback edición). New York: W. H. Norton. pp. 125–161, 308–311. ISBN 0393317552.
- ↑ Sandweiss, Daniel H.; Michael E. Moseley (2001). «Amplifying Importance of New Research in Peru». Science 294 (5547): 1651-1653. PMID 11724063. S2CID 9301114. doi:10.1126/science.294.5547.1651d.