Gay

hombre que se siente atraído sexual o románticamente hacia otros hombres

La palabra gay (sustantivo o adjetivo; plural: gais)[1][2][3][4]​ es una manera de designar a las personas homosexuales masculinas, es decir, a aquellos hombres a los que los atraen sexual y emocionalmente otros hombres.[5]

Dos jóvenes besándose
«Gay» es un término que describe a los varones que se sienten atraídos afectivamente y/o sexualmente. En la imagen un samurái besa a actor de kabuki ca. 1750.

La principal diferencia entre las denominaciones «hombre homosexual» y «gay» (que hasta la década de 1970 significaba ‘alegre’ o ‘divertido’ en inglés) es que este último es un término positivo, importado del inglés y elegido originalmente por la comunidad gay de San Francisco (California, Estados Unidos) para referirse a sí mismos,[6][7]​mientras que «homosexual» es un neologismo, que originalmente en inglés tenía connotaciones negativas relacionadas con una patología, enfermedad o tara. Fue acuñado en 1869 por el escritor austriaco Karl-Maria Kertbeny y popularizado más tarde por el psiquiatra alemán Krafft-Ebing.

En países hispanohablantes, gay se refiere casi exclusivamente al género masculino (por lo tanto, no se aplica a las mujeres lesbianas o transexuales), estén o no fuera del armario.[8]​ El transformismo, el travestismo y la transexualidad son fenómenos independientes (entre sí y con los gais), que pueden estar relacionados o no; por ejemplo, un hombre trans puede ser tanto gay como heterosexual y un hombre que no es gay puede ser transformista.

Etimología

Procedencia lingüística

 
El triángulo rosa, uno de los símbolos homosexuales masculinos (gay)[9]

El término «gay» es un anglicismo o préstamo de origen occitano y no del idioma inglés, como popularmente se cree; ya que en realidad lo del derivado del inglés, hace alusión a la homosexualidad asumida.[10]​ Este término fue incluido en la vigesimosegunda edición del Diccionario de la Real Academia Española (DRAE), edición de 2001. Proviene del vocablo provenzal «gai» (en castellano ‘gayo’, como en La gaya ciencia) y significa ‘alegre’ o ‘pícaro’. Con tal sentido lo utiliza el poeta Antonio Machado en el poema «Retrato» que publicó en 1906 en el periódico El Liberal y que luego apareció en su libro Campos de Castilla, donde habla del «gay trinar» para indicar que él no era un ave de esas que cantan alegremente.

En la Inglaterra victoriana, el término «gay» se aplicaba a los hombres que ejercían la prostitución homosexual, por el modo alegre en que vivían y la forma en que se vestían. Finalmente, el término «gay boy» (literalmente «chico alegre», «prostituto» o «taxi boy») se convirtió en sinónimo de homosexual dentro de la lengua inglesa.

En el cine, la primera película que usó este término fue Bringing Up Baby, de 1938, con Cary Grant.[11][12]

 
Clavel verde, flor de la homosexualidad masculina[13]
 
Matrimonio gay con hijo adoptivo

¿Gay u homosexual?

 
Marcha del Día del Orgullo Gay en Buenos Aires, Argentina, en el año 2007.

Gran parte de las asociaciones gais hispanohablantes, se decantaron hace tiempo por el uso del término «gay», frente a homosexual, optando por difundir su uso e incluyéndolo en sus nombres, tal como hacen COGAM (colectivo de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales de Madrid) y FELGTB (federación estatal de lesbianas, gais, transexuales y bisexuales) de España, reflejando así la predilección por este término de sus asociados. De manera similar, las páginas web y medios de comunicación especializados en el colectivo usan preferentemente «gay», aunque hay otras asociaciones como la CHA (Comunidad Homosexual Argentina) de Argentina o el Movimiento de Liberación Homosexual MOVILH de Chile que optan por el otro término.

Véase también

Referencias

  1. '«gais» es el plural de «gay»' Fundéu BBVA, consultado el 14 de enero de 2012.
  2. Real Academia Española y Asociación de Academias de la Lengua Española (2023). «gay». Diccionario panhispánico de dudas (2.ª edición, versión provisional). Consultado el 3 de mayo de 2012. 
  3. Real Academia Española. «gay». Diccionario de la lengua española (23.ª edición). Consultado el 23 de mayo de 2017. 
  4. «[...] cuando a una palabra terminada en -y se le añade una s para formar el plural, la -y del singular —que conserva en el plural su valor vocálico— debe transformarse en -i; así, el plural de jersey debe escribirse jerséis; el de espray, espráis; el de gay, gais; el de yóquey, yoqueis, etc. Son, pues, ortográficamente incorrectos en español los plurales terminados en *-ys: *esprays, *gays, *norays, etc.». Citado en RAE y ASALE (2010). «La representación gráfica de los fonemas: uso de la letra y para representar el fonema /i/». Ortografía de la lengua española. Madrid: Espasa Calpe. p. 81. ISBN 978-6-070-70653-0. 
  5. Harper, Douglas (2001–2013). «Online Etymology dictionary». Consultado el 14 de octubre de 2015. 
  6. «GLAAD Media Reference Guide – Offensive Terms To Avoid». 21 de abril de 2012. Archivado desde el original el 20 de abril de 2012. Consultado el 14 de octubre de 2015. 
  7. «Avoiding Heterosexual Bias in Language». American Psychologist. Septiembre de 1991. Consultado el 7 de mayo de 2016. 
  8. Denise, Winterman (8 de marzo de 2008). «How 'gay' became children's insult of choice». BBC News. Consultado el =29 de mayo de 20165. 
  9. Jorge, Miguel. «Cómo un símbolo nazi fue transformado en el segundo mayor símbolo del orgullo gay». Gizmodo en Español. Consultado el 15 de enero de 2018. 
  10. Origen de la palabra «Gay» Consultado el 14 de octubre de 2015
  11. Russo, Vito (20 de septiembre de 1987). The Celluloid Closet: Homosexuality in the Movies. HarperCollins. ISBN 978-0-06-096132-9. Consultado el 14 de octubre de 2015. 
  12. xoregos (2 de diciembre de 1941). «La fiera de mi niña (1938)». IMDb. Archivado desde el original el 15 de octubre de 2015. Consultado el 14 de octubre de 2015. 
  13. «Del clavel a la bandera. Breve historia de la iconografía gay». Yorokobu. Consultado el 15 de enero de 2018. 

Enlaces externos