Fuga (película)

película de 2006 dirigida por Pablo Larraín

Fuga es una película chileno-argentina dramática de 2006,[1]ópera prima del director Pablo Larraín[2]​ y protagonizada por Benjamín Vicuña, Gastón Pauls, Alfredo Castro y Francisca Imboden. Fue estrenada el 30 de marzo de 2006 en Chile y el 1 de marzo de 2007 en Argentina.

Sinopsis editar

Se relata la historia de Eliseo Montalbán[3]​ (Benjamín Vicuña), quien en su infancia ve cómo su hermana está muerta y siendo violada sobre un piano, mientras incidentalmente se compone una pieza musical que después, según él, carga la muerte. Este evento produce que el niño crezca como un prodigio en la música con una personalidad obsesiva y perturbada, sobre todo con la pieza musical, con la cual luego con su base compone una Rapsodia, su obra maestra, la cual al momento de estrenarla, su interés amoroso, la pianista Georgina (Francisca Imboden), fallece a instantes de haberla comenzado a interpretar frente a un Teatro Municipal de Santiago lleno. Esto provoca un intenso tormento mental que lo lleva a su padre, a encerrarlo en un manicomio, donde Eliseo cae en la clandestinidad y el olvido.[4]

Mientras un atormentado Eliseo permanece en la clandestinidad luego de huir del manicomio, Ricardo Coppa (Gastón Pauls) intentará con un grupo de músicos recuperar la pieza musical de Montalbán y así hacerla suya, sin darse cuenta de que están corriendo peligro.[5][6]

Reparto editar

 
Benjamín Vicuña es el actor principal del film.

Críticas editar

 
El piano, uno de los ejes principales en la película.

Pese a reunir cerca de 100 000 espectadores en las salas chilenas, Fuga sufrió una dura recepción de la crítica y la prensa en general. Según columnas y artículos publicados en la época, a Larraín se le criticó que su padre fuera Hernán Larraín, actual senador e importante dirigente de la UDI, y los ataques por su supuesta filiación política fueron numerosos.

La cinta costó un millón de dólares y tuvo de protagonistas a Benjamín Vicuña y el argentino Gastón Pauls, pero eso poco importó. Acusada de ambiciosa, Fuga echó mano a recursos propios de la publicidad, le guiñó el ojo a filmes clásicos y su propio exceso la hizo inverosímil, según dijeron las críticas.[7]

Por ello, el camino del director ha sido curioso. De ser acusado de tener una "herencia derechista" a causa de la filiación política de su padre, a crear algunos de los filmes sobre la dictadura militar más alabados del cine chileno en el circuito internacional (Tony Manero, Post mortem, No) en sólo un lustro. Podría ser la constatación de una evolución notable de temas y estilos, o quizás la ceguera de cierta prensa que lo lapidó antes de tiempo.

A continuación algunas de las críticas de diversos medios:

«En “Fuga” es largo lo inexplicado, hay demasiado por deducir y el sentido de la historia se desperdiga en el aire: la creación de la música, la tragedia de un músico, la simbiosis del genio con su enfermedad y le pasa a Larraín con “Fuga” lo que a Montalbán con su concierto: son piezas en formación, alteradas, con dificultades de expresión e incompletas»
Antonio Martínez, Wikén.[cita requerida]
«“Fuga” es bastante obvia y las cosas que quedaron abiertas deberían estar cerradas y viceversa. (…) Más que adentrarse en la mente del artista engorda la idea que se tiene sobre el artista: el tipo perturbado que no tiene otro medio de expresión que no sea el arte»
Jorge Moreales, Mabuse.[cita requerida]
«Esta también podría ser la historia del director, un veinteañero, con algunos contactos, que logra juntar más de un millón de dólares para hacer su primera película. ¡Fantástico! Pero las buenas intenciones no bastan cuando, qué metáfora más apropiada, no se tienen dedos para el piano»
Ángel Carcavilla, La Nación.[cita requerida]
«El gran peso muerto que carga el filme es su propia sensación de clausura, de aislamiento. La impresión de que está hecha “dando las espaldas al mundo” (al revés que varios filmes chilenos del último tiempo, desde “Actores secundarios” a “En la cama”, que consiguen dar una idea bastante precisa del Chile que habitan, sea este real o ficticio). De que es incapaz, en suma, de conseguir un mínimo margen de credibilidad para que el público se “compre” a una pareja teniendo sexo en los altos del Municipal en plena función, o una persecución por las calles de Valparaíso con un contrabajo en la espalda, o ver al hijo de un ministro de Estado recluido en un hospital siquiátrico a punto de caerse a pedazos»
Christian Ramírez, Artes y Letras.[cita requerida]
«Por enésima vez llega a la pantalla una película chilena que no tiene punto de vista y que está narrada desde un limbo donde todo vale igual»
Héctor Soto, Capital.[cita requerida]
«Todo parte muy bien con un primer acto interesante y bien contado, pero que a nivel de historia empieza a naufragar cuando Montalbán entra al manicomio y termina por hundirse con la desmesurada escena final cuando las dos historias terminan convergiendo».
Juan Pablo Vilches, Civilcinema.[cita requerida]

Premios editar

Durante 2006 y 2007, Fuga estuvo entre los nominados de varios festivales de cine internacionales, los cuales fueron:[8]

Festival Internacional de Cine de Cartagena 2007
Categoría Nominado Resultado
Mejor ópera prima Pablo Larraín Ganador
Mejor película Pablo Larraín Nominado
Festival de Málaga de Cine Español 2007
Categoría Nominado Resultado
Territorio latinoamericano: Mejor película Pablo Larraín Ganador
Territorio latinoamericano: Mejor actor Benjamín Vicuña Ganador
Festival Trieste de cine latino-americano 2006
Categoría Nominado Resultado
Mejor película
Ganador
Mejor actuación Benjamín Vicuña
Gastón Pauls
Ganadores

Referencias editar

Enlaces externos editar